Lee mi artículo «Guía vintage de Malasaña: mucho más que Velarde y Espíritu Santo»
Cuando llegué a Malasaña y cree este blog, comencé a investigar mucho sobre la moda vintage e incluso llegué a trabajar en una de las tiendas que por aquel entonces estaban en el barrio y que en la actualidad se ha trasladado a Elche, La Cierva, posiblemente de las mejores que he conocido hasta el momento en cuanto a selección y calidad. No soy ninguna experta en moda, pero en este campo aprendí mucho y hoy os quería dar algunos consejos que podéis aplicar si vais a comprar vintage:
Lo primero y más importante es que sepáis qué diferencia hay entre vintage, segunda mano y retro, tres conceptos que tienden a confundirse y que son completamente diferentes; para no ponerme muy teórica, trataré de explicarlo de la manera más sencilla posible: una prenda vintage es aquella que tiene mínimo veinte años y que ha sido confeccionada a pequeña escala y que su calidad tiende a ser muy buena. Para distinguirlas bien en las tiendas, debéis fijaros en la tela, los remates de las costuras, sus botones y la etiqueta; generalmente la gran mayoría de ellas proceden de boutiques, modistas, sastrerías o firmas que en su filosofía incluyen la exclusividad, por lo que comunmente no van a ser prendas excesivamente baratas: además de fijarte en todos estos puntos, es importante que revises también el estado en el que se encuentran, ya que de nada te servirá comprarte un traje Chanel si la tela está desgastada por su uso excesivo. Una prenda de segunda mano puede haber sido confeccionada hace más de veinte años o la temporada pasada y se vende tratando de darle una segunda vida; por lo general, se han fabricado a gran escala o su calidad es inferior a la de una prenda vintage, lo notarás nada más tocarla. La moda retro es aquella que diseña prendas actuales con inspiración vintage; generalmente suelen tener una buena calidad y llega a las tiendas de la mano de diseñadores independientes, aunque cada vez con más frecuencia las grandes marcas, como por ejemplo el grupo Inditex, tienden a inspirarse (o más bien, plagiar) en los diseños de las pequeñas firmas.
Una vez tengáis claros estos conceptos, es hora de irse de tiendas:
- Si es demasiado barato, posiblemente no sea vintage: casi todas las tiendas que venden ropa de este estilo suelen incluir en su nombre el concepto de vintage, aunque lo que realmente vendan sea principalmente segunda mano, así que tienes que intentar que no te den gato por liebre. Por lo general, el precio de la ropa vintage es más elevado que el de segunda mano, por lo que deberás fijarte en los puntos que te he mencionado anteriormente: la calidad y el estado de la prenda. Cuando veas un baúl repleto de prendas entre 1 y 3 euros, no dudes en revisarlo porque puede que encuentres verdaderas gangas, pero ten por seguro que no será vintage, sino segunda mano.
- No sigas modas, busca lo que realmente encaje con tu estilo y con tu armario: Como en todo en esta vida, lo vintage también sigue modas: los Levi´s cortos, las camisas hawaianas, las pajaritas… todo ha sido tendencia y aunque hay algunas que permanecen, otras han ido desapareciendo, por lo que te aconsejo que, como en la moda actual, apuestes solo por aquello que encaje con el resto de las prendas de tu armario, ya que de nada te servirá comprarte un vestido vintage de hombreras y lentejuelas si después no encuentras ocasión para ponértelo. Cuando entres al probador y empieces a crear conjuntos, imagínatelo con esas piezas básicas que ya tienes y si eres capaz de visualizarlo en varios outfits, entonces será una buena compra, si no, mejor déjala de nuevo en la percha.
- Combina lo vintage con lo actual: A veces, tratar de combinar un conjunto completo de ropa vintage, puede llegar a hacerse demasiado cargante, así que mezclarlas con otras más básicas, es el secreto para que parezcan más especiales. Lo importante es que al salir a la calle no te sientas disfrazado, sino acorde con tu estilo.
- ¿Y si no encuentras tu talla? ¡Personalízalo! Algo muy común que sucede en las tiendas vintage es que haya tallas muy grandes o muy pequeñas; seguramente te habrá pasado que hayas visto una prenda que te encante, pero al ponértela no te cierre o te quede como un saco. Si no te cierra, tendrá difícil solución, pero si te queda algo grande, puedes customizarla: atar una camisa, añadir un cinturón a un vestido, remangar un pantalón, son algunas soluciones sencillas que en este tipo de moda favorecen mucho. El secreto para encontrar verdaderos tesoros es no cerrarte y dejar volar tu imaginación (y si sabes coser, ya ni te cuento).
- Si te gusta pero no sabes con qué ponértelo, no te lo compres: Una de las ventajas de comprar moda vintage es que se fomenta el consumo responsable, dando una segunda vida a prendas que ya están fabricadas; además, puedes crear conjuntos de excelente calidad a precios justos, pero de nada servirá todo esto si te compras algo que luego no te vas a poner y vas a dejar colgado en una percha de tu armario. Compra de manera consciente, valorando el uso que le vas a dar y si no eres capaz de visualizarte con algo en más de una ocasión, mejor no te lo compres porque será dinero perdido.
- El secreto, los accesorios: Una de las cosas que más me gusta comprar en las tiendas vintage son los accesorios: cinturones, bisutería, bolsos… puedes encontrar verdaderas maravillas que convierten cualquier conjunto básico en algo especial, además de ser originales, únicos y de buena calidad. Posiblemente a los complementos les saques más partido que a cualquier otra cosa que puedas comprar en este tipo de tiendas que, junto a las prendas de abrigo, suelen ser mis preferidas.
- Busca, rebusca y encontrarás: Si decides irte de compras vintage, es mejor que no vayas con prisa, ya que necesitarás más tiempo que en una tienda al uso para encontrar lo que buscas. A pesar de que cada vez con más frecuencia están muy bien organizadas (Vintalogy Madrid es un claro ejemplo de orden y pulcritud) todavía las hay que no tienen la ropa muy bien seleccionada, pero te aconsejo que no por ello descartes entrar porque pueden esconder prendas con mucha magia. Tómate tu tiempo, ármate de paciencia y disfruta de la experiencia, como cuando vas a una librería de segunda mano.
- Revisa bien las tallas: Cuando vayas a comprarte una prenda vintage es muy importante que te la pruebes, porque el tallaje de antes no tiene nada que ver con el de ahora, así que no te fíes solo de un número y métete en el probador porque además, los cortes de las prendas son también muy diferentes y a lo mejor al vértelo puesto no encaja con lo que imaginabas en tu cabeza.
Y hasta aquí mis consejos del día de hoy. Muchas veces he pensado en hacer un vídeo sobre este tema porque puede que viéndolo sea todo mucho más sencillo y útil, así que si os parece una buena idea, no tenéis más que decírmelo y, aunque no soy una experta en edición, puedo intentarlo.
Y vosotros, ¿tenéis algún truco más que se me haya escapado que utilicéis a la hora de comprar moda vintage?
¡¡Animate al vídeo Adri!!
Los tips y consejos son brutales, tendremos que aplicarlos!